A medida que una startup o una empresa crece hay algo que siempre preocupa: la gestión de personas. Y no, no es algo de lo que solo se encarga el departamento de recursos humanos. La realidad es que la gestión de personas tiene que ver con el desempeño y el desarrollo de los diferentes equipo en el día a día de una organización, así que los managers tienen mucho que aportar aquí.
Si no sabes qué es la gestión de personas, por qué deberías prestarle atención y qué puedes hacer para desarrollarla en tu organización, sigue leyendo.
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¿Qué se entiende por gestión de personas?
La gestión de personas se puede definir como un conjunto de técnicas y buenas prácticas que buscan mejorar cómo trabajan, se relacionan y crecen los equipos dentro de una organización. A diferencia del enfoque tradicional de los recursos humanos, la gestión de personas va más allá de supervisar y gestionar documentos.
Este nuevo enfoque apuesta por formar, motivar y orientar a todos los miembros de la organización para que puedan mejorar su flujo de trabajo diario y seguir desarrollándose profesionalmente dentro de un equipo. La gestión de personal, por ende, influye en el rendimiento global de una empresa y en el logro de metas. Cuando los colaboradores trabajan con motivación y enfoque, sus esfuerzos se dirigen a superar los desafíos del negocio y alcanzar un crecimiento sostenible.
Importancia de la gestión de personas en las organizaciones
El objetivo de la gestión de personas es el desarrollo individual y colectivo de los miembros de tu equipo, y este el verdadero motor que permite que toda organización crezca. Pero por el camino, verás que es importante para muchos otros aspectos del día a día de tu empresa:
- Optimizas el rendimiento laboral: poner el foco en las necesidades de tu equipo para trabajar mejor dispara su motivación y, por lo tanto, la productividad.
- Mejoras la comunicación interna: la comunicación abierta forma parte del ADN de la gestión de personal, porque se sienten escuchados y tú, puedes gestionar mejor sus expectativas y sacar lo mejor de ellos.
- Previenes la insatisfacción: comunicarte con tus trabajadores también te ayuda a detectar inquietudes y resolver conflictos, algo clave para mantener un ambiente laboral saludable.
- Fomentas el desarrollo y la igualdad: hablando también identificas necesidades de formación y desarrollo en todos tus talentos. Destinando recursos para ello garantizas la igualdad de oportunidades mientras enriqueces tu cultura organizacional.
- Fomentas el trabajo en equipo: si el clima laboral es positivo y la gestión de conflictos es la adecuada, el trabajo en equipo fluye solo.
- Retienes talento humano: si inviertes en el desarrollo profesional de tus team members, te aseguras su satisfacción y permanencia en la empresa.
- Creces como empresa: haz una gestión estratégica de tu personal y crecerás, porque estarás alineando el desarrollo del talento humano con tus objetivos.
Cómo gestionar al personal de una empresa con un buen plan
Para beneficiarte de todo lo anterior necesitas un buen plan de gestión de personas que reúna, al menos, estos 5 puntos clave:
1. Conoce sus necesidades y ambiciones
Intenta comprender las aspiraciones profesionales de todas las personas para ver cómo pueden encajar con los objetivos de la empresa. Lo más fácil es detectar estas inquietudes desde el mismo momento en que los entrevistas, pero si no, una simple conversación durante el onboarding o a los pocos meses de incorporarse basta.
2. Estructura tu proceso de selección para reclutar al talento adecuado
Es fundamental tanto aprovechar al máximo el talento existente como seleccionar cuidadosamente al nuevo personal que se incorpora, por lo que contar con un proceso de selección bien definido es esencial:
- Tener claros los perfiles qué necesitas para los roles que necesita el negocio
- Conocer las responsabilidades que debes cubrir y cómo se ve ese rol en 6 meses, en 1 año…
- Cuáles son las competencias esenciales y qué habilidades debes priorizar
- Definir los comportamientos que encajan con la dinámica del equipo
- Identificar las preguntas y/o ejercicios para evaluar todos estos puntos
Y, básico: tener ojo avizor para detectar aquellos candidatos que compartan los valores de la empresa (¡la intuición, en esto, nunca falla!).
3. Ofrece formación y desarrollo continuo para retener talento
Tu plan de gestión de personas tiene que incluir programas de formación que no solo mejoren las habilidades técnicas, sino que también fomenten competencias blandas, como la comunicación y el trabajo en equipo. Pero para retener, esto debe ir acompañado de un plan de carrera con acciones concretas para el desarrollo profesional individual.
4. Evalúa a tu equipo, pero también escúchalos
Toda organización debe tener un sistema de evaluación del desempeño y proporcionar retroalimentación constructiva. ¿Has detectado fallos que se repiten una y otra vez en ciertos procesos? Pregunta y escucha porque, quizás, el problema es que hacen falta recursos y herramientas para que estos fallos no se repitan.
A nivel colectivo, puedes programar reuniones específicas de evaluación y medir la satisfacción general con encuestas. Recuerda también hacer evaluaciones culturales para asegurar la alineación del equipo.
5. Ten una buena política de salarios y beneficios laborales
¿Crees que los salarios que ofreces se ajustan a la carga laboral y a las expectativas de cada uno de los miembros de tu equipo? De nuevo: comunícate con ellos porque, a veces, ellos valoran mucho más otros beneficios. Horarios flexibles, opciones de trabajo remoto, programas de bienestar… En definitiva, otros aspectos que mejoran su calidad de vida y que a ti, seguro, te ayudarán a retener a todo ese talento. Identifica qué compensaciones y beneficios son importantes para tus colaboradores.
En Fresh People llevamos toda nuestra vida profesional enfrentándonos al reto de convertir la gestión de las personas en el motor de tu empresa y no en el freno. Así que, si quieres, te ayudamos a pegar un acelerón.
